El partido de llerena a finales del XVIII

El partido de llerena a finales del XVIII

sábado, 5 de noviembre de 2016

LLERENA Y SU PARTIDO EN LA FINANCIACIÓN DEL PUENTE DE SEGOVIA EN MADRID


 
La puente de Segovia en 1670. Al fondo el palacio de los Austria (Anónimo)




El puente de Segovia en la actualidad

Nos referimos al puente más antiguo de los que hoy dispone Madrid sobre el Manzanares, construido a partir de 1582 sustituyendo a otro más antiguo y siguiendo el proyecto de Juan de Herrera, uno de los arquitectos de Felipe II, que también intervino en la dirección de las obras del Monasterio del Escorial y en las del Palacio Real de Aranjuez, entre otros edificios de la época. Su construcción costó un buen puñado de maravedíes, tirando una vez más Felipe II con pólvora ajena, la de sus súbditos, de los que requirió un nuevo esfuerzo fiscal.

La pomposa monumentalidad de la puente segoviana para un rio, el Manzanares, de tan escasos recursos hídricos, fue objeto del sarcasmo de las más ágiles plumas del Siglo de Oro, como Tirso de Molina, Góngora, Lope de Vega o Quevedo. Así:

-      Tirso le llamaba braguero de piedra.  

-      Góngora proponía adquirir otro río más acorde con su ampuloso puente.

-      Lope de Vega, le dedicó esta coplilla:

Y aunque un arroyo sin brío // os lava el pie diligente // tenéis un hermoso puente // con esperanzas de río.

-      Y Quevedo, puesto a ironizar, le cantaba:

Llorando está Manzanares, // al instante que lo digo, // por los ojos de este puente, // pocas hebras, hilo a hilo.

No fue esta la única obra pública sufragada directamente por los súbditos, pues lo más habitual era recurrir a ellos ante cualquier obra de estas características.

Para el caso del puente que nos ocupa, Felipe II, mediante una Real Provisión firmada en Madrid, el 24 de mayo de 1581, se dirigió a los oficiales concejiles de Madrid, y a los de todos los concejos de la Corona de Castilla y, tras  desearles salud y gracias, les manifestó que las puentes segoviana y toledana que estaban sobre el río Manzanares a su paso por la Villa y Cortes de Madrid se encontraban viejas y maltratadas, dificultando el acceso de las numerosas personas que usualmente necesitaban resolver asuntos en la Villa y Cortes, especialmente en épocas de avenidas y, en general, en tiempo de invierno. Para poner remedio a esta situación, que no solamente impedían la circulación de caballerías, carros y carretas, sino el de los viandantes, acordó con el asesoramiento de sus consejeros que se levantase una puente de piedra en el dicho río que fuesse ancha, para más comodidad y servicio de todos los que por allí pasasen, como así se hizo. Añadía que ya se había agotado el fondo o partida presupuestaria señalada para ello, sin terminar las obras y a falta de mejorar los caminos de accesos a la puente, tanto en la parte de entrada a Madrid como en la de salida. Por ello, tomó la decisión de solicitar (exigir) de sus súbditos otros once quentos y trescientos y ochenta y un mil y doszientos y cinquenta maravedís (11.381.250), repartiendo los mismos entre la villa de Madrid y aquellos otros concejos de la Corona que pudieran aprovecharse de la comodidad que representaba su construcción, estando entre ellos los incluidos en la Provincia de León de la Orden de Santiago en Extremadura, a los que se les repartió las siguientes cantidades:

CONCEJOS
MARAVEDÍS
 
CONCEJOS
MARAVEDÍS
Llerena y aldeas
24.000
 
Reyna y su arrabal[1]
2.000
Casas de Reyna
2.200
 
Valverde de Reyna
2.600
Concejo de Trassierra
2.200
 
Los Ayllones de Reyna
4.500
Fuente el Arco
5.200
 
Concejo de Verlanga
7.000
Villa de çuaga
20.000
 
Concejo de la Granja
7.000
Campillo
5.000
 
Concejo de Retamal
3.000
Valençia de la torre
9.000
 
La Era de Ornachos
4.000
Villa de Ornachos
20.000
 
Villa de Ribera
14.000
Hinojosa
4.000
 
Puebla de la Reyna
4.600
Concejo de Palomas
5.000
 
Villa de  Oliua
600
Alhange y su tierra
10.000
 
Villa gonçalo
2.500
Almendralejo
20.000
 
Azevchal
11.000
Villafranca
10.000
 
Fuente el Maestre
20.000
Sanctos de Maymona
16.000
 
Valençia del Ventoso
10.000
Puebla de S. Pérez
14.000
 
Medina de las Torres
no consta
Cd. Xerez junto a Badajoz
25.000
 
Villa de Segura
10.000
Fuentes y el Cañaveral
8.000
 
Arroyomolino de León
2.500
Cabeça la Vaca
5.000
 
Calera
2.350
Villa de Monasterio
7.000
 
Montemolín
9.500
Fuente de Cantos
19.000
 
Calçadilla
12.000
Vienvenida
5.000
 
Vsagre
16.000
Guadalcanal
28.000
 
Ciudad de Mérida
16.000
La Naba
1.000
 
Sanctana
400
Cordouilla
550
 
Carmonita
450
Esparragoso
1.600
 
Carrescalejo
1.500
Truxillanos
1.150
 
San Pedro
2.500
Don Aluaro
2.200
 
Torre Mexia
750
Calamonte
3.000
 
Valverde de Mérida
5.500
Alcuçen
1.350
 
Arroyomolinos de Mérida
8.500
Puebla de la Calzada
3.000
 
Alguyjuela
4.500
Mirandilla
5.500
 
Garrouilla
5.500
Lobón
8.000
 
Montijo
9.000
Montánches
1.800
 
Almoharín
3.000
Saluatierra
1.500
 
Alcuesca
3.500
Botija
850
 
Casas de Don Antonio
1.250
Çarça de Montánchez
2.000
 
Bienquerençia
200
Torre de Sancta María
1.500
 
Valdefuentes
900
Concejo de Aluala
2.400
 
Arroyomolinos de Mont.
4.000
Torremocha
4.100
 
Puebla del Prior
1.150
Puebla del Conde
2.800
 
TOTAL MRS.
514.650

 

En total, le correspondió pagar a los 79 concejos de la Provincia de León con sede de tesorería en Llerena la cantidad de 514.650 maravedíes de los 11.381.250 mrs. del servicio extraordinario reclamado. Desconocemos los criterios aplicados para el reparto del servicio entre los pueblos santiaguistas de Extremadura, pero por el redondeo de las cifras intuimos que no se siguió ni el censo provincial ni los padrones usuales, sino que se repartió a ojo de buen cubero, aplicando el frecuente principio de quien parte y reparte…


Impreso de la época que recoge el reparto del servicio

La Real Provisión anterior llegó al gobernador de la Provincia de León de la Orden de Santiago, con sede en Llerena, como máxima autoridad fiscal en dicha provincia, remitiendo una copia certificada a los concejos de su demarcación fiscal, para que tuvieran razón de la misma y actuaran en consecuencia; es decir, que recaudaran y pagaran la cantidad encabezada. Advertía el monarca:

…que dentro de veynte días primeros siguientes de la notificación desta nuestra carta, den y paguen, e hagan dar e pagar a costa de os dichos concejos, a cada uno lo que de suso consta que le está repartido, puesto e pagado en Llerena en poder de Juan de Portillo…

        El texto confirma que en 1581 Llerena seguía ostentado el titulo administrativo de sede de tesorería provincial dentro de la Corona de Castilla, si bien ya para esas fechas existía un gobernador en Mérida, con competencias jurisdiccionales en una buena parte de la Provincia de león. En concreto, pertenecían al partido judicial de Mérida los pueblos recogidos en negrita en la tabla que precede.


Los partidos de Mérida y Llerena

        Volviendo a la Real Provisión y puente que nos ocupa, el monarca advertía a los oficiales concejiles de cada concejo, manifestando que procederían contra ellos y sus bienes particulares en el caso de no recaudar entre sus vecinos las cantidades de maravedíes aplicadas, cargando también a su costa los elevados gastos y dietas de los oficiales que se mandaran desde la Corte para resolver estos asunto, gastos seguramente más cuantiosos que los reclamados en la Real Provisión.

        Ya para finalizar, desconocemos dónde y cómo se llevó a cabo el reparto al por mayor de los 11.381.250 maravedíes  de este servicio, ni tampoco entre cuántas de las usuales 36 provincias o distritos fiscales se repartió. El reparto al por menor entre los distintos concejos de la provincia fiscal de la Orden de Santiago en Extremadura solía hacerse en la tesorería de Llerena, bajo la supervisión del gobernador de turno, en esta ocasión, como ya hemos indicado, en una proporción que no respondía a la usual distribución de los servicios ordinarios, ni a los padrones vecinales, como se demuestra en el redondeo de las cifras contempladas.  


La España de Felipe II, con las 18 provincias y ciudades con Voto en Cortes

Esta distribución territorial se mantuvo hasta que en 1655 Extremadura obtuvo el rango de provincia, cuando Alcántara, Badajoz, Cáceres, Mérida, Plasencia y Trujillo compraron el voto en cortes. Es preciso destacar el hecho de que Llerena, pese a no ser una de las ciudades con Voto en Cortes, continuaba encabezando uno de los partidos de mayor extensión. En su más amplio significado (olvidándonos del distrito inquisitorial y centrándonos en el de tesorería de servicios votados en Cortes) comprendía los 45 pueblos ya reseñados en servicio extraordinario para la construcción de puente que nos ocupa.


Extremadura y sus partidos en el XVII
Croquis tomado de LORENZANA DE LA PUENTE F. La representación política en el Antiguo Régimen. Las Cortes de Castilla, 1655-1834, Tesis doctoral dirigida por Miguel Ángel Melón Jiménez (dir. tes.), Alfonso Rodríguez Grajera (dir. tes.). Universidad de Extremadura, 2010

 




[1] El segundo concejo que aparece en la relación, tras el de Llerena y aldeas, y así en este orden.

No hay comentarios:

.