La era
geológica es una unidad geocronológica,
un periodo de tiempo muy extenso de millones de años, en el que suceden
diversos fenómenos, tanto biológicos como geológicos, relacionados con la
formación de la Tierra y la aparición de la vida sobre ella.
Para
estos efectos, se ha dividido la Historia de la Tierra en cinco eras o épocas geológicas: Arcaica,
Paleozoica, Mesozoica, Cenozoica Terciaria y
Cuaternaria, cada una de ellas con distintos periodos y cada periodo
propio de un tiempo determinado en la Historia de la Tierra.
En esta
ocasión nos centraremos en la primaria y en el Carbonífero, el período que
imperaba en el planeta hace aproximadamente 350 millones de años. Según
National Geográphic, el Carbonífero debe su nombre a unos enormes depósitos de
carbón subterráneo que data de este período y que se originaron a partir de la
vegetación prehistórica. La mayoría de estos depósitos se encuentran en
determinadas partes de Europa, América del Norte y Asia, regiones que, durante
el Carbonífero, se encontraban situadas en el trópico y contaban con una
vegetación exuberante.
El
carbón de este período se produjo a partir de árboles con corteza que crecían
en enormes bosques pantanosos. La vegetación incluía licopodios, helechos y
equisetos gigantes así como imponentes árboles de hojas liguladas. A través de
millones de años, los depósitos orgánicos de los restos vegetales han generado
la mayor concentración de carbón del mundo, un carbón que los humanos todavía
estamos quemando hoy.
El
crecimiento de estos bosques eliminó grandes cantidades de dióxido de carbono
de la atmósfera, produciendo un excedente de oxígeno. Los niveles de oxígeno
atmosférico subieron hasta un 35 por ciento, mientras que en la actualidad
disponemos de un 21 por ciento. Esta abundancia de oxígeno propició un
incremento exponencial del tamaño de las plantas vasculares. También explicaría
la aparición de gigantescas criaturas reptantes, pues el tamaño que alcanzaron
los insectos y otros seres similares se considera limitado por la cantidad de
aire que eran capaces de respirar.

De la
hoja nº 877 del Mapa Geológico de España en su edición de 1956 (suele
identificarse como hoja de Llerena), hemos tomado algunas notas referentes a
ciertas minas de carbón situadas en el término de Casas de Reinas, hoy
abandonadas pero fáciles de localizar por el impacto ambiental que han dejado,
pese a su escaso rendimiento. En primer lugar hemos recogido un corte geológico
del terreno en dirección SO a NE, que muestra los distintos pliegues y estratos
de rocas, recogiendo igualmente la erosión recibida.
A
continuación, una ligera descripción de las minas, seguida de las distintas
especies de vegetales fosilizados que observaron los geólogos de entonces.
A
finales de los años setenta del pasado siglo se produjo un relanzamiento de las
explotaciones carboníferas, entre ellas las situadas en el margen izquierdo de
la carretera de Casas de Reina a Llerena, más concretamente a la altura del
carril que discurre en dirección a la finca conocida por Salinas. Por lo que pude comprobar en su momento, prácticamente se
limitaron a remover tierra de un lado para otro, alterando seriamente el
paisaje, apareciendo lagunas y montículos. En definitiva, la explotación
resultó ruinosa, mostrando la escasa incidencia del Carbonífero es esa zona de
Casas de Reina.
Por lo demás,
el trasvase de tierra sí dejó a la vista interesantes restos fósiles de vegetales de la
época, especialmente de sus tallos y ramajes, que tuve la oportunidad de recoger y guardar, mostrando a continuación
alguno ejemplares de extraordinaria calidad pertenecientes a las Esfenopsideas
(diversas especies de Calamites), y a las Licopodineas (distintas especies de
Sigillaria, Lepidodendron y Stigmaria). Aparte, también hemos observado otros
fósiles con frondes u hojas de distintas familias, géneros y especies, como Alethopteris,
Salix y diversos Helechos
Entre los Calamites hemos seleccionados los siguientes:
El mejor ejemplar de Sigillaria es el que sigue:
También el Lepidodendron esta muy bien representado:
Localizamos una extraordinaria raíz de Stigmaria:
Y algunas impresiones de hojas: